Al comenzar en el mundo freelance es difícil saber la tarifa por prestar los servicios profesionales. ¿Será mucho? ¿Será muy poco? Son preguntas típicas de algunos. Y como si esto fuera poco está la otra pregunta: ¿Cómo cobro?
¿Y entonces que hago?
A la hora de calcular la tarifa que vas a cobrar puedes preguntar a personas conocidas que se desempeñen independientemente en tu mercado, cual es la tarifa que ellos cobran y que te den una idea aproximada de cuanto puedes cobrar tú. Si te dicen que cobran varios millones de pesos, probablemente tienen una larga experiencia y un good will muy reconocido, así que si es tu primer proyecto no cobres lo mismo por que te pueden tildar de loco.
El contar con experiencia laboral en el área de tu especialización te servirá para calcular tu tarifa, pues no cobrará lo mismo un freelance recién egresado de la Universidad que uno con una amplia experiencia y trayectoria, así haya sido adquirida como empleado. Funciona igual que en el mercado laboral, a mayor experiencia, mayores son los ingresos. Aunque esto no quiere decir que siempre sea así, un profesional recién egresado puede tener un gran número de proyectos realizados en su haber y darse el lujo de cobrar una buena suma de dinero, sin embargo para conseguir un primer proyecto en ocasiones hay que trabajar por debajo de los costos. Sacrificios que hay que hacer! Recuerda que algunas empresas están dispuestas a pagar más por la reducción de los costos de aportes fiscales y seguridad social.
No subestimes tu trabajo. Aunque hayas realizado pocos proyectos o ninguno, ten en cuenta que es tu trabajo y son tus conocimientos y que para eso te esforzaste estudiando, entonces, ¿no es justo una paga acorde a lo que eres? No pienses en los “proyectitos” que haces, si son pequeños ahora, mañana serán grandes proyectos.
¿Y para cobrar?
Lo primero que debes tener en cuenta es si vas a cobrar por hora, día, mes o proyecto realizado, a esta altura ya conoces la tarifa de tu servicio y no te quedará difícil decidirlo.
Puedes necesitar el modo de facturar, pues al prestar tus servicios ciertas empresas te van a pedir factura para ellos justificar su gasto. Tienes dos opciones: facturar a través de otra empresa o persona natural, o estar registrado como Persona Natural ante la Cámara de Comercio para emitir facturas con tu NIT (Numero de Identificación Tributaria) y haber solicitado tu RUT (Registro Único Tributario) ante la DIAN, siendo ésta última la mejor opción porque cuando las cosas te estén saliendo bien es mejor tener tus papeles en regla.
Está la posibilidad de ser Persona Jurídica, es decir empresa, ya sea unipersonal (de una sola persona) o si te asocias con otras personas, crear una de Responsabilidad Limitada, de esta manera también puedes generar facturas.
Lo importante es que para desarrollarte como freelance debes tomar la profesión muy en serio, solo así garantizas el éxito y aseguras que seas visto como un profesional que optó por la vía de la independencia.
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